Ecologista antinuclear muere arrollado por el tren radioactivo en Francia, Econoticias, 34




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Semana del 05 al 20 de noviembre 2004

Internacional


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7 de noviembre del 2004. A las 14,40 el joven francés Sébastien Briat, militante antinuclear de 21 años, fue arrollado por un tren de 2.000 tn y 400 m. de largo, que transportaba 12 contenedores de residuos nucleares vitrificados con 174,7 toneladas de residuos de centrales atómicas, procedente de La Hague (fábrica de reprocesamiento de combustible nuclear gastado en el Estado francés) en dirección a Gorleben (Alemania), el depósito de residuos nucleares alemán. Sébastien se había encadenado a la vía cerca de Avricourt, en Meurthe-et-Moselle, municipio situado a unos 40 km al este de Nancy, y el convoy ferroviario de residuos nucleares le seccionó las dos piernas.

El joven se había encadenado a la vía férrea entorno a las 14:40 del domingo en uno de los múltiples actos de resistencia pacífica no violenta que se dan por todo Europa contra el transporte de residuos radioactivos. Poco antes del trágico accidente, el tren ya había sido bloqueado entre las 11:20 h y las 13:20 del mismo día en Laneuveville –frente a Nancy por dos militantes antinucleares que también se habían encadenado a la vía del tren pero que fueron desalojados por los guardas de seguridad del convoy. En el momento de producirse el accidente el tren avanzaba a más velocidad de la permitida (unos 100 km). Argumentan que los servicios externos de vigilancia no vieron al joven situado después de una curva y que el helicóptero estaba repostando. Todo ello provocó, según los responsables, que no tuvieron tiempo de detener el tren el cual seccionó las piernas del militante que murió antes de poder ser atendido por los servicios de urgencia. Los verdes alemanes y, en general, el movimiento antinuclear en Europa, considera que el suceso debe ser investigado a fondo pues intuyen responsabilidad delictiva.

El convoy ferroviario salió a última hora de la tarde del sábado de la terminal de la Compañía General de Materiales Nucleares (Cogema), del grupo Areva en Valognes. El tren descarga en el centro de almacenamiento de Gorleben, al norte de Alemania. Los residuos vitrificados de este cargamento son el resultado del procesamiento del combustible obtenido con unas 600 toneladas de uranio que permitieron generar electricidad suficiente para abastecer durante un año a 25 millones de personas.

Este es el séptimo convoy de estas característica que vuelve a Alemania, desde que las compañías eléctricas de este país y Cogema firmaron en abril de 1996 un contrato para su tratamiento. Este material se transporta en ferrocarril hasta la ciudad portuaria alemana de Dannenberg y por carretera se dirige hasta Gorleben a unos 20 km.

El sábado, unas 5.000 personas se habían manifestado en Dannenberg en contra de este cargamento. Entre los manifestantes, bastantes más que los que se concentraron el pasado año por la misma razón, había docenas de campesinos subidos en sus tractores. La manifestación discurrió por el centro de la ciudad y concluyó en el muelle al que debe llegar el tren. La protesta transcurrió sin incidentes y con menos vigilancia policial que el pasado año.

La Red Vivir Sin Nucleares realizará un homenaje por el coraje de Sébastien depositando flores en la estación del tren. El movimiento ecologista lamenta profundamente por la muerte horrible de este activista que de forma pacífica estaba llamando la atención pública sobre el riesgo radioactivo en el que vive nuestra sociedad.



Modificado
09/02/2017

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